A estas alturas ya es muy claro que COVID-19 no solo afecta la salud de miles de personas, sus efectos llegan más allá. Uno de los sectores afectados más importantes de un país, es su economía

Cada vez son más las naciones que proclaman cuarentena o que invitan a los habitantes a no salir a menos que sea por emergencia. Con esto, muchas personas dejan de salir a trabajar y los ingresos se reducen, pero las cuentas no paran, o al menos hasta ahora. 

Italia es el segundo país más afectado por COVID-19, por lo que se ha visto en la necesidad de aplicar varias medidas extremas como aislarse por completo, restringir vuelos o declarar en cuarentena a todos sus habitantes. 

Ante esta angustiosa situación y tomando en cuenta las limitaciones que tendrán los ciudadanos italianos durante las próximas semanas, el gobierno italiano tomó la decisión de congelar algunos pagos.

Pagos de crédito hipotecario, crédito de liquidez, crédito pyme, facturas, impuestos, entre otros, se congelarán para aliviar la presión sobre hogares y/o empresas pequeñas. 

Dichas medidas se realizarán con el fin de aminorar el impacto económico que la pandemia por coronavirus ha provocado. 

Cabe recalcar que Italia no es el único país que ha puesto en marcha medidas de auxilio para sus habitantes. 

EE.UU redujo sus tasas de interés a casi cero e implementó un programa de estímulo de US$700 millones cuyo propósito es proteger su economía. 

Por su parte, España ha aprobado una moratoria hipotecaria cuyo fin es aplazar los pagos de quienes se  han visto más afectados.

Otros países se encuentran estudiando las posibles medidas a tomar ante esta crisis, relajando la política fiscal para ayudar a quienes más lo necesitan. 

En México aún no se toman medidas para congelar pagos como crédito de liquidez, o hipotecas dado que el país aún se encuentra en fase 1 y sigue habiendo movimiento habitual, aunque se espera que a finales de mes la situación cambie drásticamente.