¿Quieres obtener un crédito hipotecario, comprar un auto o quizá pagarte un viaje a Europa, pero te impide tu baja o nula capacidad de ahorro? 💸

Esto es más frecuente de lo que crees, ya que en realidad la cultura del ahorro en México es prácticamente inexistente. 

Por ejemplo, según los resultados de una encuesta realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en conjunto con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, casi la mitad de la población no ahorra en absoluto. 

De hecho, solo el 4.6% de los adultos ahorra de manera formal, mientras que el 63.2% ahorra con métodos informales como tandas. 

¿Cuáles son los métodos formales de ahorro?

El ahorro formal es aquel en el que guardas tu dinero con una entidad financiera, ya sea un banco, afore o cualquier otra institución. Sus principales ventajas radican en la seguridad y confianza que te da el saber que tu dinero está resguardado ante la ley. 

Puedes elegir entre diversas formas de ahorro en la institución de tu elección: 

• cuenta de ahorro
• cuenta corriente
• caja de ahorro
• inversiones, etc. 

¿Cómo puedo ahorrar de esta forma? 💰

En realidad no es tan difícil, solo debes acudir a la institución de tu elección y preguntar por los planes de ahorro que tienen disponibles. Si quieres tomar una decisión inteligente, puedes comparar las opciones de diferentes instituciones e irte por la que mejor te convenga. 

Además te pueden ayudar a crear un plan de ahorro que se adapte a tus necesidades. 

Considera que este tipo de ahorro también tiene sus desventajas, por ejemplo; el cobro de impuestos, el cobro de intereses por apertura, el monto mínimo solicitado para abrir la cuenta de ahorro, etc. 

Ahorro informal 💰

Este tipo de ahorro no está regulado por ninguna institución financiera ya que se resguarda en tandas, esquemas piramidales o bien en tu propia casa. 

Algunas de las ventajas de este método de ahorro son: 

• tienes el dinero a tu alcance y entera disposición en caso de alguna urgencia
• tu tienes el control sobre cuánto dinero ahorrar
• no debes pagar comisiones 

Por otro lado, este tipo de ahorro también tiene sus riesgos:

• tu dinero se encuentra expuesto a robos o extravíos
• estás propenso a gastar el dinero ahorrado
• tu dinero no genera rendimiento

Si finalmente te decides por ahorrar de manera informal, en este blog te diremos cuáles son los mejores métodos de ahorro para conseguir tu objetivo. 💰

El Reto de las 52 semanas

Este reto puede parecer un poco largo pero es perfecto para quienes tienen un hábito nulo de ahorro. 

Tal como su nombre lo dice, el ahorro dura 52 semanas y consta de lo siguiente: 

La primera semana debes ahorrar $10, la segunda semana $20, la tercera semana $30 (tan solo aquí ya van ahorrados 60 pesos) y así sucesivamente, vas aumentando 10 pesos cada semana hasta conseguir $13,780 al final de las 52 semanas.

Otra forma de ahorrar con este método, es hacerlo al revés. Es decir, comienzas con la cantidad máxima de dinero que puedes ahorrar a la semana y de ahí vas reduciendo $1 o $10 según la cantidad que hayas ahorrado inicialmente. 

Por ejemplo, si iniciaste ahorrando $100 a la semana, puedes rebajar un peso y ahorrar $99 la siguiente semana. Tú decides. (: 

Método Kakebo

Este método de ahorro de origen japonés es tan popular como efectivo y fácil de poner en práctica. Su principal objetivo es tener bajo completo control las finanzas personales ¿Cómo? Anotando todos los ingresos y gastos que se tiene en el día a día. 

¿Esto cómo me ayuda a ahorrar? Este método propone que si tienes todos tus gastos diarios anotados, en algún momento podrás controlarlos por completo, y por consecuencia comenzarás a ahorrar. 

Para hacer más fácil el monitoreo de tus gastos diarios, Motoho Hani, autora de este método, propone dividirlos en 4 secciones: supervivencia (todo lo que es imprescindible para vivir, ocio y vicio (de donde tendrías que eliminar más gastos para ahorrarlos, cultura y otros (imprevistos).

Método ALP 

Sus siglas ALP significan: ¨Aparta Lo Primero¨  y hacen referencia a la práctica de apenas recibir la nómina o ingreso principal, apartar una cantidad de dinero para el ahorro y sobrevivir con el resto. 

Esto es contrario a lo que muchos hacen ya que destinan al ahorro solo una pequeña parte de su salario o lo que les sobra al final de quincena. 

Este método se basa en la idea de que cuando ahorramos inicialmente una cantidad, el cerebro comienza a buscar soluciones para sobrevivir satisfactoriamente con lo que resta en la cuenta.

Otra forma de llevar a cabo este método es analizar cuánto dinero se recibe al mes o a la quincena y tomar nota de cuánto y en qué se gasta durante ese periodo de tiempo tanto en gastos imprescindibles (pago de tu crédito hipotecario, servicios básicos, etc.) como en los gastos de capricho (ocio, antojos, etc).

Una vez obtenida la suma de estos 2 tipos de gastos, debes sacar esta cantidad exacta de dinero de tu cuenta y sobrevivir solo con esto, lo demás se irá para el ahorro. 

Método de ahorro Harv Eker

Este es un método un poco más laborioso que los anteriores pero brinda resultados igual de satisfactorios. Se trata de dividir el dinero del que dispones en 6 proporciones diferentes: 

• 55% para cubrir las necesidades básicas
• 10% para ahorrar
• 10% para la formación
• 10% para inversiones a largo plazo
• 10% para ocio
• 5% para donativos (la sección de donativos es opcional, por lo que puedes sumarla al porcentaje destinado al ahorro)

The Balanced Money Formula

Si lo que buscas es una manera más sencilla de ahorrar dinero, este método es el indicado para ti. También es conocido como la regla del 50/30/20 y es muy fácil de poner en práctica. 

Aquí el 50% de tus ingresos deben ser destinados a gastos básicos relacionados con el pago de tu crédito hipotecario, servicios básicos, compra de alimentos, transporte, etc. 

El 30% va para gastos personales de ocio, ropa, regalos, etc. 

Y finalmente el 20% de tus ingresos debe ser ahorrado, aquí también se incluyen inversiones. 

El método de los sobres 

Esta es una técnica con aproximadamente 80 años de antigüedad, pero aún en nuestros días sigue siendo muy efectiva. Se trata de reunir todos tus ingresos en efectivo y colocar en un sobre diferente cada presupuesto destinado por ti mismo para determinados gastos. 

Puedes tener un sobre para alimentos, para servicios básicos, para el pago de tu crédito hipotecario y así varios sobres más hasta cubrir todos tus gastos imprescindibles. 

Una vez que tengas todos tus gastos básicos cubiertos, debes apartar de entre el dinero que te sobra el 10% para ahorrar. 

Elige el método de ahorro que mejor se adapte a ti y a tus necesidades y pronto podrás irte de vacaciones, conseguir tu crédito hipotecario, comprar tu auto o cualquiera que sea tu meta. 

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