Hay momentos y situaciones en los que solicitar un crédito se vuelve más una necesidad que una opción y desafortunadamente también hay casos en los que por alguna situación se vuelve complicado pagarlos. 

Cuando esto sucede hay diferentes formas de actuar. La más recomendable es negociar con la otra parte para llegar a un plazo en que se pueda cubrir la deuda o pagar solo una parte de ella. También está la opción de no pagar y dejar que el tiempo borre la deuda, que dependiendo la cantidad puede requerir hasta 6 años. 

Si no vas a solicitar ningún tipo de crédito o producto financiero, no te afectará tener un score crediticio bajo, pero si necesitas financiamiento de cualquier tipo, es necesario que cuentes con un buen historial crediticio o no aprobarán tu solicitud de crédito. 

Aquí es cuando entran las reparadoras de crédito ⬇️

Se trata de empresas cuyos servicios se enfocan en la negociación de tus deudas con tus acreedores con el fin de llegar a un acuerdo que beneficie a ambas partes. 

Acudir con este tipo de empresas es recomendable en los casos donde ya intentaste llegar a una negociación por ti mismo pero no funcionó o simplemente el trato al que llegaron no fue satisfactorio para ambas partes.

Si decides hacerlo, es importante que consideres que las reparadoras de crédito en México no son figuras debidamente reguladas, por lo que aunque existen empresas con este tipo de servicios que están identificadas y en operación, no cuentan con un marco legal que las regule. 

Si aún así decides contratar los servicios de una reparadora de crédito para mejorar tu score crediticio, considera lo siguiente: tu deuda debe provenir de una institución y ser mayor a los $35,000 MXN. Además, se te cobrará una pequeña comisión por la negociación y liquidación de la deuda. 

¿Contratarías los servicios de una reparadora de crédito?

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