Los Juegos Olímpicos Tokio 2020, llevados a cabo entre julio y agosto del 2021 debido a la pandemia por coronavirus, nos han dado mucho de qué hablar no solo en nuestro país sino también en el mundo.
Y si bien en nuestro país destaca el debate sobre el excelente desempeño de atletas mexicanas como Alexa Moreno, Ana Paula Vazquez, Aranza Vazquez, Dafne Navarro, Tonatiu López, que quedaron a escasos pasos de llegar a zona de medallas, hay también un tema del que prácticamente está hablando todo el mundo.
Nos referimos a la salud mental de los atletas de alto rendimiento, un tema que ha puesto sobre la mesa Simone Biles, considerada actualmente la mejor gimnasta de la historia, al anunciar que se retiraba de la competencia por equipos.
Y si bien las primeras reacciones ante esta noticia fueron críticas negativas tanto del público como de algunos atletas, con el paso de los días y gracias a las declaraciones de la gimnasta, se ha hecho realmente visible por primera vez la presión que sufren los atletas durante los juegos olímpicos.
Por ello, este blog está dedicado a hablar sobre la salud mental en deportistas de alto rendimiento.
Comencemos por decir que contrario a lo que muchos puedan creer, este no es un tema que recién surge en estos juegos olímpicos. De hecho, atletas de talla mundial como Michael Phelps y Serena Williams ya habían comentado padecer alguna enfermedad mental derivada de la presión que implica ser un atleta de alto rendimiento con los reflectores apuntándoles en todo momento.
Y es que si bien los deportistas están entrenados para ser tolerantes a la frustración, las competencias siempre son la punta más alta de estrés y presión, por lo que tomar terapia con un experto o experta con licenciatura en psicología, es imprescindible para mantenerse sanos y obtener mejores resultados.
Naomi Osaka
Previo a los juegos olímpicos, Naomi Osaka, reconocida tenista japonesa, habló de su salud mental por medio de un ensayo redactado en primera persona que fue publicado por la revista Time.
Además, Osaka se retiró del Abierto de Francia llevado a cabo en mayo por razones de salud mental y tiempo después reveló que su retiro se debió a fuertes ataques de depresión derivados de cuando ganó su primer título de Grand Slam en 2018.
Entre las declaraciones hechas por la tenista de 23 años resalta la siguiente:
¨Me siento incómoda siendo la portavoz o la cara de la salud mental de los atletas, ya que todavía es algo nuevo para mí y no tengo todas las respuestas. Espero que la gente se sienta identificada y entienda que está bien no estar bien, y que está bien hablar de ello¨
También mencionó que el formato actual de las conferencias y ruedas de prensa a las que se ven sometidos los y las atletas, tiene un gran desprecio por la salud mental de los deportistas por lo que es necesario actualizarlas.
Por otro lado, en cuanto a su participación en los Juegos Olímpicos, Osaka fue eliminada en la tercera ronda ante Marketa Vondrousova. Posteriormente, declaró que había sentido mucha presión por ser sus primeros juegos olímpicos.
Simone Biles
Simone es considerada la mejor gimnasta de la historia y con tan solo 24 años tiene todos los ojos del mundo sobre ella cada que participa en un evento. Y las olimpiadas no son la excepción ya que todo el mundo esperaba que diera las mejores presentaciones en cada una de las pruebas en las que participaría.
Sin embargo, estas expectativas desaparecieron cuando Simone anunció que se retiraba de la competencia final por equipos, del All Around Individual y posteriormente de la final de salto de caballo y barras asimétricas.
Al respecto, Simone Biles declaró:
“Cuando entro en el tapiz somos mi cabeza y yo. Trato con los demonios que hay en mi cabeza. Después de la actuación que hice, no quería seguir. Tengo que centrarme en mi salud mental. Creo que la salud mental está más presente en el deporte ahora mismo. Tenemos que proteger nuestra mente y nuestro cuerpo y no limitarnos a hacer lo que el mundo quiere que hagamos“
Minerva Cervantes, experta con licenciatura en psicología deportiva especializada en atletas de alto rendimiento, comentó acerca de la importancia de lo que ha hecho Simone durante estos juegos y cuestionó cuántas veces los deportistas han sufrido ansiedad o depresión y aún así se han visto obligados a competir.
No obstante, aunque la presión de Biles por ganar disminuyó, las críticas hacia su decisión no se hicieron esperar. El ejemplo más claro y polémico de esto fue Novak Djokovic, un tenista serbio que no dudó en declarar en respuesta a Simone:
“Sin presión no habría deporte profesional. Si ansías ser el mejor en tu deporte debes aprender a hacer frente a la presión. Y cómo hacer frente a esos momentos en la pista, pero también fuera de ella”
Y aunque su comentario dividió opiniones, pocos días después sus palabras se hicieron carentes de sentido cuando durante un partido por la medalla de bronce perdió el control al tirar su raqueta varias veces contra las gradas hasta terminar por destrozarla y arrojarla al foso de los fotógrafos.
Estos hechos sumados a los comentarios de atletas de alto rendimiento que se animan a hablar de la importancia de la salud mental deportiva, hacen aún más visible la importancia de contar con la asesoría de expertos con licenciatura en psicología deportiva.
Finalmente para concluir este blog es necesario aclarar la valentía y fortaleza de Simone Biles al reconocer su vulnerabilidad y romper con una muy arraigada tradición de estoicismo en el deporte.
Además es importante mencionar que la gimnasia, es una de las disciplinas más riesgosas de las olimpiadas por lo que un problema mental puede impedir el control completo del cuerpo y terminar por ocasionar una lesión física permanente.
Por ahora, estos hechos marcan un precedente para darle el lugar que merece a la salud mental de los atletas en las competencias por medio de un programa conformado por expertos con licenciatura en psicología deportiva.
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