Todos hemos visto intercomunicadores en más de una película o en una mansión, son esos porteros digitales en donde la gente suele ver y comunicarse con quien toca a su puerta. 

A pesar de la creencia popular, estos no son solamente para casas con extensiones muy grandes pues suma comodidad y seguridad a quienes suelen atender la puerta. 

Lo primero que hay que saber, es que hay diferentes modelos:

  • Inalámbricos: Como su nombre lo indica, no requiere ningún tipo de cable para su funcionamiento, es el más práctico y por ende, el más costoso. 
  • Intercomunicadores por cable: Su precio se abarata un poco más, su ventaja es que no dependen de la señal del lugar para funcionar. 
  • Video intercomunicador: Es un sistema cableado en donde es posible ver un video en vivo de la persona que está detrás de la puerta, es sumamente útil en el hogar. 

Su funcionamiento


Los interruptores de un intercomunicador se encuentran conectados un receptor y a un transmisor parecidos a los auriculares de un teléfono. Cada estación debe estar conectada a una estación base y a una fuente de energía.

Tienen un alcance limitado, sin embargo, eso los vuelve más seguro. Su audio es de muy buena calidad y no interfieren otras señales. Cuentan con altavoz, aunque también puedes tener conversaciones privadas. 

Entre sus beneficios, está que no genera gastos de tarifa telefónica y podemos tener una comunicación al exterior de la casa, sin arriesgar nuestra seguridad. 

A diferencia de la creencia popular, el costo es bastante accesible, pues hay modelos que no superan los 2 mil pesos. Puedes adquirirlos en tiendas de electrónica y al igual que todos los artefactos de las casas inteligentes, genera confort, seguridad y ahorro de energía.